Los más pequeños tienen una tendencia natural a moverse y jugar, por lo que el trabajo de padres, profesores y entrenadores es saber aprovechar ese instinto y procurar convertirlo en una forma de vida saludable. Los beneficios de animarlos a llevar un estilo de vida activo desde una edad temprana repercutirán de manera positiva cuando sean adultos.
El running es una gran opción siempre y cuando sea practicado a una intensidad acorde y se adapte a la forma física y edad de cada niño. Además debemos tener siempre presente que para ellos correr debe ser un juego, nunca una obligación: siempre será más fácil que haga deporte si la actividad le resulta divertida.
Se pueden enumerar múltiples beneficios de esta disciplina, entre los que enumeramos: 1) mejoría del acondicionamiento cardiovascular, 2) fortalecimiento de huesos, 3)mejoría del control metabólico de glucosa en sangre, 3)mantenimiento del peso corporal, 4)aumento de la fuerza muscular y flexibilidad corporal, 5) mejoría de la agilidad, equilibrio y coordinación (sobre todo combinado con otras disciplinas deportivas), 6) mejoría de la gestión de emociones, 7) aumento del apetito, 8) mejoría del estado de ánimo y concentración. Se debe tener en cuenta que los niños que corren 2 o 3 veces por semana desde niños pueden reducir un 20 % el riesgo de desarrollar enfermedades de corazón, obesidad, diabetes e hipertensión arterial en la adultez.
Entonces… ¿Cuándo y cómo?
Hay consenso generalizado entre pediatras y especialistas en educación física que los niños NO DEBEN EMPEZAR A CORRER (como deporte en sí, entiéndase) HASTA QUE HAYAN CUMPLIDO 5 AÑOS, debido a que a esa edad adquieren la maduración musculo-esquelética suficiente para logra una buena postura y coordinación, evitando así la aparición de lesiones. Entre los 5 y los 8 años, se debe organizar la actividad como UN JUEGO, y de a poco ir aumentando la distancia, la cual no debe superar 1 KILOMETRO POR SESIÓN. SE DEBEN EVITAR LOS EJERCICIOS DE VELOCIDAD a esta edad.
Desde los 8 a los 12 años los niños procuran por todos los medios completar los recorridos y lograr sus metas, pero son poco conscientes de su forma de correr y generalmente se agotan, debido a que sus músculos aún no poseen gran capacidad de resistencia unido a la poca capacidad cardiorespiratoria. Hay que acompañarlos y explicarles de manera sencilla qué significa correr, también que existe una técnica de carrera que evitará en cierta medida el agotamiento y las lesiones. Nunca se debe exceder los 3 km de distancia total.
A partir de los 12 años presentan una capacidad para mejorar y progresar apabullante y es aquí donde se recomienda que inicien con entrenamientos en running más específicos. La carga total de entrenamientos en adolescentes mayores de 13 años recomendada es de 3 sesiones semanales, de 30 a 45 minutos cada una, en días alternos, con velocidades bajas (máximo entre 7 a 9 km/hora). NO SE DEBEN EXCEDER LOS 5 KMS. POR SESIÓN.
A partir de los 16 años pueden realizar carreras o entrenamientos de más de 5 kms. y la edad mínima para poder participar en maratón (42,195 kms.) es de 18 años.
A modo de síntesis, les dejo algunas consideraciones aplicables para el deporte en TODOS LOS NIÑOS (running y otros deportes):
- La actividad debe ser VOLUNTARIA, nunca impuesta.
- Tener en cuenta la etapa de crecimiento en la que se encuentra el niño, ya que es frecuente que las energías se utilicen en asegurar su crecimiento y se agoten más fácilmente ante la actividad física, hecho que debe respetarse.
- El esqueleto de un niño tiene una parte de composición cartilaginosa, por lo que estos cartílagos pueden herirse fácilmente ante cargas excesivas. NUNCA USAR PESAS EN NIÑOS Y ADLOESCENTES.
- Los niños son poco conscientes de sus límites reales; debemos guiarlos permanentemente para evitar excesos.
- Asegurar una BUENA ALIMENTACIÓN Y DESCANSO, independientemente de la cantidad de ejercicio que realice el menor.
- Cuidar la hidratación del niño, ya que tienen mayor riesgo de deshidratarse; protegerlos del frío o calor excesivos.
- Acompañar al niño a sus entrenamientos; DEBEMOS SER SUS GUÍAS. Felicitarlos SIEMPRE por el trabajo realizado, dejando a un lado la premisa de que GANAR es lo único que sirve.
- Haga caso a los signos de cansancio que manifieste el pequeño.
- NUNCA SE DEBE ENTRENAR A UN NIÑO COMO SI FUERA UN ADULTO EN MINIATURA.
- SIEMPRE deje el entrenamiento de un niño en manos de un PROFESIONAL CALIFICADO, como un profesor de educación física o un entrenador con formación académica en entrenamiento de menores.